Hace ya unos cuantos años que soy socio de SEO/BirdLife, el año que viene hará 25 años. Durante todo este tiempo, y como es lógico, la sociedad en general y SEO en particular ha ido evolucionando en muchos aspectos. A SEO la han llevado a ser una Sociedad influyente en temas ambientales-sociales, trasladando a una gran parte de la sociedad esas inquietudes sobre las aves, los hábitats, la conservación y su influencia en las personas, todo ello apoyado por un creciente número de socios, muchos de los cuales con una gran capacidad de colaboración voluntaria. Por todo ello (y más cosas), sigo estando orgulloso de pertenecer a SEO/BirdLife .
Pero vuelvo a aquellos años 80, cuando, en mi incipiente interés por las aves, todo aquello que tenía alguna relación, era, fotocopiado, leído, guardado o simplemente ansiado, ya que económicamente no eran unas edades muy propicias para el gasto, y aunque así fuese, el material disponible era más bien escaso, y no fueron pocas las veces que me tenía que conformar con ver la Peterson en la estantería de la librería.
No recuerdo de qué manera llegó a mis manos el primer Boletín-Circular de SEO, La Garcilla, pero sí recuerdo la impresión que me produjo su contenido, aumentando de forma exponencial mi interés por las aves, según leía cada hoja de aquél nº 64, llegando casi al éxtasis en el relato del descubrimiento y descripción de un Charadrius Mongolus, a través del cual se me mostraban nuevas especies y lugares nunca antes oídos. Poco a poco el volumen de información que aquel Boletín proporcionaba iba ocupando espacio en mi estantería al igual que los libros sobre aves. Después de tomar la decisión de mi pertenencia a SEO, la llegada de cada número de La Garcilla suponía la búsqueda de aquellos artículos maravillosos, en los que los problemas de identificación de algunas especies quedaban más o menos despejados y los relatos de encuentros con nuevas especies para la avifauna ibérica seguían alimentando intensamente esta pasión por el conocimiento y observación de las aves.
Estos artículos, en general no muy extensos, siempre se encontraban dentro de La Garcilla junto con otros muchos artículos en los que se daba cuenta de las actividades de la Sociedad, se planteban nuevos retos y proyectos, problemas de conservación de espacios naturales o de aves en concreto. En definitiva un compendio de artículos, a mi entender perfectamente armonizados en lo que una revista de una sociedad ornitológica podía ofrecer a sus socios.
Seguían pasando los años y aquellos artículos se sucedían uno tras otro, siendo leídos y en más de una ocasión releídos, problemas de identificación de Bisbitas, Agateadores, Collalbas, Carricerines, Fochas, Cernícalos, Charranes….relatos del primer Eider Real, Rabitojo Mongol, Mosquitero de Pallas, Abejaruco Papirrojo,….nuevos lugares y nuevas aves en el mundo, Alaska, Cuba, Los Llanos Venezolanos, La Antártida y hasta uno mío sobre la Patagonia Argentina (nº89)…Pero como he dicho antes, entre estos artículos destacaban los dedicados a Conservación, Agricultura, Plan Hidrológico, Energía…y muchos más que al igual que los puramente ornitológicos alimentaban ese afán conservacionista y de protección de aves y hábitats que debe fluir en paralelo al conocimiento si realmente quieres seguir disfrutando de las aves.
A medida que seguían llegando números, se vislumbraba una clara evolución de la SEO, con grandes logros (Santoña), grandes proyectos de conservación (Riet Vell), de estudio y divulgación (Atlas, Censos) y al igual que en el resto de la sociedad poco a poco los artículos de educación ambiental se hicieron un hueco en La Garcilla. Por contra, aquellos otros artículos relativos a identificación, especies nuevas, lugares, etc… se iban espaciando cada vez más, aunque de vez en cuando surgían para recordar el carácter ornitológico de la Sociedad, y la identificación de Garzas, el santuario ornitológico de Beidaihe o la primera Focha Americana, volvían a escena, alimentando de nuevo y renovando ese interés, por las aves.
Los 50 años de SEO marcan un antes y un después en La Garcilla, cambia a un mayor formato, aspecto y espacio disponible. En la editorial del nº 118, primer número con este nuevo modelo, se destaca lo anterior, así como se anuncia una renovación de contenidos, diciendo que se pretende dar satisfacción a todo el colectivo de socios, calificándolo de heterogéneo, lo cual nunca entendí, en una Sociedad con un claro y tan limitado carácter, el Estudio y Conservación de las Aves y sus Hábitats.
Personalmente no me gustaba el mayor tamaño de la revista, aunque, si por contra, el contenido mejoraba, evidentemente que no sería para quejarse.
El mayor tamaño, sí trajo mayor información, y como más o menos auguraba aquella editorial, de todo un poco, aunque los artículos sobre conservación eran los que más espacio acumulaban, algo para celebrar, ya que es el primer paso para disfrutar de las aves. Al igual que los últimos números de La Garcilla pequeña, los artículos de aves nuevas surgían como los ojos del Guadiana, muy de cuando en cuando, el Petrél Antillano, La Gaviota Cocinera, más habituales eran los del los espacios naturales, el P.N. Manu, la Bahía de Santander…, pero…espera….haber en este….no….en este otro…tampoco…espera, aquí hay uno, el Alcaudón Real y el Norteño, artículo de identificación, despejando las dudas surgidas sobre estas especies en esos momentos.
Parecía, que si heterogéneo era el colectivo de socios, no se reflejaba esto en los contenidos de la nueva Garcilla, pero bueno, será que cada vez el conocimiento del Ornitólogo Español y los medios a su alcance evitan la publicación de este tipo de artículos, ¡¡bien!!, cada vez sabemos más de identificación de aves.
La muerte de La Garcilla creo que ha sido uno de los grandes errores de SEO/BirdLife, ¿que problema había por seguir manteniendo una cabecera exclusiva y con tantos años a su espalda?.
Sucedió, sin más, Aves y Naturaleza (AyN) surgió para ocupar ese puesto. ¿La nueva cabecera traería nuevas cosas?….He recibido periódicamente AyN y con cada número una nueva decepción. De aquellos artículos antes ansiados, sólo los que describen lugares donde observar aves mantienen su esporádica aparición, pero…¿donde están las Aves Nuevas para España?. Anualmente el Comité de Rarezas de SEO/BirdLife homologa cada vez un número mayor de citas de aves raras o escasas, y cada año, existen incorporaciones de nuevos taxones a la lista de Aves de España….¿acaso esto no tiene cabida en AyN?….La pequeña Garcilla lo reflejaba habitualmente incluso con un casi inexistente material gráfico…. pero en AyN las aves raras son raras de verdad.
Bueno, debido a que cada vez se descubren nuevos datos que ayudan a una mejor identificación de las aves y los nuevos medios de identificación están trayendo nuevas especies a nuestra lista, espero que esto sí aparezca en AyN…..nº 1, 2, 3, 4…., trece números de AyN, lo que supone cuatro años de publicación y ni un sólo artículo de identificación.
Bueno, después de más de 25 años observando aves, con los medios informáticos existentes y tal y como está dotada mi biblioteca ahora, es fácil que no necesite este tipo de artículos….pero… siguen siendo estos los que más hecho en falta en la revista de mi Sociedad. Muchos de los artículos que aparecen en AyN de conservación y noticias, con abrir el facebook te asaltan por mil caminos y mucho más actuales. Con un creciente número de nuevos socios…¿nadie necesita aprender más sobre lo que nos gusta?.
Se podría pensar que en países con mayor tradición ornitológica, con muchísimas más revistas, documentos y libros sobre el tema, las revistas pasasen de publicar artículos de identificación. Vamos a ver, por ejemplo, Bird Watching, revista especializada, de pago, cuenta hasta con una sección de ID, es decir, echando cuentas, esta publicación es mensual, con lo que disponen en un año de por lo menos 12 artículos de identificación, lo que trasladado a AyN suponen cuatro años. No hablemos ya de Aves Raras, donde tienen verdaderos especialistas en esta materia.
Bueno, estamos hablando del país que es la cuna de la Observación de las Aves. Veamos una Sociedad similar a la SEO, pongamos Aves Argentinas, unos 1.000 socios. Bueno seguro que frente a los 12.000 de SEO/Birdlife, les supone un problema el mantener una revista con variedad de artículos, dejando aparte El Hornero revista científica homóloga de Ardeola, tenemos Aves Argentinas revista de naturaleza y conservación, algo similar a AyN….pero también Nuestras Aves con contenido focalizado en las aves argentinas y del mundo, incluyendo trabajos de campo e investigaciones relacionadas con la temática…., no es que de ciento en viento incluyan un artículo puramente ornitológico, si no que mantienen una revista entera!!!!!
En definitiva, la actual revista de comunicación de SEO/BirdLife, Aves y Naturaleza, a mi entender, carece de la esencia de la ornitología, y por tanto dudo mucho, que alguien, con 12, 13 ó 14 años que esté iniciándose en este maravilloso mundo, ante la lectura de AyN sienta lo que yo sentia cuando leía La (Pequeña) Garcilla.